jueves, 21 de julio de 2016

TE ECHO DE MENOS

Querido abuelo:
Te echo de menos. Me da miedo algún día poder olvidarte y no honrarte como te mereces. Fuiste una buena persona que pasó por mucho dolor injustamente. No tuviste una vida fácil desde tu principio del camino, y eso lo has recordado siempre. En tus últimos días te hacías preguntas sobre eso, aunque tu ya sabías que nadie te las podía responder. Estabas muy cansado y triste, pero tú modesto y humilde, nunca querías que nadie supiese que estabas así. Pero todos conocíamos de tu dolor. Espero que ahora, estés donde estés puedas descansar y todas las preguntas puedan desaparecer.
Yo ahora, por ti y por mí intentaré cuidar de la yaya y honrarte siempre. Nadie muere si lo mantienes en el recuerdo. Me da pena, que antes de irte no supiera hacer los arroz con leche como tú. Ya no podré saborear tan buenos postres como los que tu hacías para todos nosotros.
Te echaré de menos, pero aún y así, estoy feliz al saber que querías despedirte de mí pero yo lamentablemente no pude estar allí. Aprovecho ahora para despedirme, pero no puedo. Debes disculparme si te digo que lo haré poco a poco. Te quiero demasiado yayo.


No hay comentarios:

Publicar un comentario